martes, 5 de abril de 2011

Sonríe

Desde siempre estaba en la ventana, desde siempre le recuerdo allí, todas las mañanas le veía mirarme desde su piso y cuando volvía del colegio estaba otra vez ahí, creo que nunca nos encontramos cara a cara pero pero teníamos una relación mucho más especial, sin ningún tipo de contacto, debía tener más de setenta años y creo recordar que iba en silla de ruedas, ya era una costumbre cruzar la calle, mirar hacia arriba y sonreír siempre igual.

Un día mire hacia arriba, era un día soleado,de verano, de mis últimos días de clase y vi las cortinas corridas, tuve un mal presentimiento y decidí no ir a clase me quede toda la mañana sentado en un banco, justo enfrente de la fachada de su casa. Justo cuando pensé en volverme a casa ruido por las escaleras, quizá le bajaran a dar un paseo pensé ilusionado. Pero no, lo que bajo por la escalera fue un féretro, acompañado de dos o tres empleados de una funeraria y de una chica que debía ser su familiar.Corrí a preguntarla, tal vez no fuera el, ella entre lágrimas me pregunto de que lo conocía,se lo conté, cojió su bolso, saco una carta me la dió y se fue. Espere a llegar a mi casa para abrir la carta eran dos lineas escritas por una mano temblorosa: “Gracias por sonreirme cada mañana eras lo único que me daba fuerzas para aguantar un día más”

viernes, 1 de abril de 2011

Breakheart

Querido TÚ:

Quiero que sepas que si quieres volver siempre voy a dejarte la ventana abierta, y también que ese corazoncito echo cachitos que dejaste cuando te fuiste lo recogí y lo pegue lo mejor que pude, es tuyo, ya lo sabes, puedes volver por el cuando quieras que se que te estará esperando que me lo ha dicho el con una voz muy bajita y medio llorando.

También recogí en el frasquito de cristal con forma de amor y dolor que me regalaste todas las lágrimas que ese corazón pequeñito, muy pequeñito, derramó cuando le gritaste que no valía nada. Y si me pides que me quede a esperarte yo también, lo haré, pero si no me lo pides me iré para siempre a un sitio donde, cuando me encuentres no puedas huir de mi. Aunque yo ya no te quiero nada…bueno un poquito pero de lo que ella me cuenta de ti por las noches cuando la ayudo a dormir por que se ahoga con los sollozos. ¿Y sabes otra cosa? Tenias razón cuando me llamabas loca, bueno, en realidad me volví loca cuando me gritaste que no valía nada, recogí mis lágrimas en un frasquito de cristal con forma de amor y dolor que tu me regalaste y tengo que consolarme a mi misma por las noches cuando me ahogo con los sollozos. Y por lo poco que sé de cuentos esta es la parte de la historia en la que me vienes a buscar

Te quiero no querer.